Los Clubes de Barrio de Florencio Varela exigen personería jurídica

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Alejandro Maraude, titular de la Unión de Clubes de Barrio de Florencio Varela, visitó Radio Gráfica. Entrevistado por Abrí la Cancha, el dirigente deportivo expresó las dificultades territoriales que tienen los clubes de Varela y la labor que están realizando desde la Unión.

Por Nehuén Ríos

 

Alejandro Maraude es el titular de la Unión de Clubes de Barrio de Florencio Varela, uno de los partidos más postergos del Gran Buenos Aires. Dirigente del club Ciclón de Barrio Luján, detrás de cada institución hay una historia de trabajo y esfuerzo. Una ligazón indestructible con la comunidad. También, reclamos que merecen ser escuchados.
«A nuestros hijos siempre los llevamos a clubes y mi hijo más chico fue al Club Ciclón. Allí me acoplé mucho y me encariñé con la institución. Como sucede en todos los clubes de barrio, los dirigentes somos padres que comenzamos a gestionar y luego nos vamos sumando a la Comisión Directiva para poder colaborar y brindar horas en nuestros tiempos libres de trabajo. Junto a mi esposa nos encontramos con un grupo maravilloso. Donde hay compromiso y responsabilidad. Esto te motiva a seguir colaborando», nos señaló Maraude.
Las realidades. No es lo mismo un club de barrio de Florencio Varela que uno de Avellaneda o Capital Federal: «Tenemos distintas realidades. En Varela los clubes son ordenados, pero precarios. Con mucho esfuerzo golpeamos puertas, sumamos padres y vecinos. Todo lo que podamos recaudar es bienvenido para seguir realizando cosas. Ciclón es un club maravilloso y familiero, pero en la cotidianidad todo cuesta mucho«.
«Los clubes tenemos distintas realidades«; señaló Maraude en Radio Gráfica, quién agregó: «En Varela hay solo tres clubes con cancha de cemento. Después, son todas de tierra con poco pasto. Con la Unión de Clubes de Barrio visitamos otros distritos y vamos conociendo todas las realidades. Ahí abrimos los ojos. Recuerdo haber estado en un club con un piso hermoso de básquet y mi sueño es tener una cancha así en Varela. No sólo por el Club Ciclón, sino por los pibes».
«En Varela convoca el fútbol, pero estamos sumando muchos deportes. En el barrio no le gusta el fútbol a todos los chicos. Nos está pasando que muchos pibes quieren jugar al voley y al hockey, pero tienen que ir a otros lugares. Esas cosas dan bronca, porque con un playón a disposición se pueden realizar un montón de actividades coordinando horarios, pero eso es lo que nos faltaría«, expresó Maraude.
Mauraude remarcó la necesidad de un vínculo más directo de la política con los clubes para solucionar problemas de mayorías: «La inmensa mayoría de los clubes de Varela necesita personería jurídica. Por falta de papeles, los clubes de Varela se están perdiendo programas muy importantes. Por ejemplo, el Clubes en Obras tan solo lo pueden recibir el 10% de los clubes del distrito. Es muy injusto que el 90% de los clubes de Varela no puedan acceder al beneficio porque hacen el mismo trabajo que ese 10% que lo recibe. Siempre digo que en tiempos de pandemia, los clubes sin personería jurídica ayudaron y colaboraron. Los clubes beneficiados fueron quienes no tuvieron esa acción solidaria. Por eso lo creo como una injusticia y algo a corregir».
El rol de los clubes de barrio en la pandemia es otro tema interesante de tratar porque la vida de los clubes de barrio del conurbano profundo cambió para siempre: «Antes de la pandemia se cobrara cuota, pero durante la pandemia el club se enfocó en ayudar a la comunidad con ollas populares y dejamos el fútbol. Nos reuníamos en la semana para enfocarnos en como ayudar. La pandemia fue difícil para la comunidad, pero los clubes dijimos presente«, expresó el titular de la Unión de Clubes de Barrio de Florencio Varela en Abrí la Cancha.
«Dia a día fuimos aprendiendo. Jamás imaginé el vínculo que generamos con el barrio. Aprendimos a estar al lado del vecino necesitado. Estuvimos junto al que no podía salir de su casa y perdía trabajo. Los clubes también perdimos infraestructura con la pandemia. Cuando volvimos a reactivar, todo se hizo muy difícil. Por suerte apareció la Unión de Clubes de Barrio para contagiar y seguir estando con las actividades deportivas, sabiendo que hay un sector que siempre está junto a ellos».
«Reactivar el club fue maravilloso«; señaló Maraude emocionado, quién agregó: «Sobre todo para los chicos, porque les cambió la vida. ¿Saben lo importante que es hacer una vida que tenga como ejes el hogar, la escuela y el club? Ese sueño se nos cumplió porque la mirada de nuestros chicos es maravillosa. Siempre decimos que hay algo que no tiene precio: la cara de nuestros pibes cuando van creciendo».
Maraude señaló la importancia que tienen las mujeres dirigentas en la vida cotidiana de los clubes de barrio: «Las mujeres son una grosas. En los clubes de barrio hay mas mujeres que hombres en las comisiones. Están laburando muy bien la mesa de genero de Florencio Varela. Hacen campañas. Las dejamos a ellas y nosotros acompañamos desde afuera»; agregó: «Lo que explotó en Varela fue el fútbol femenino. Hay muchos equipos con una competencia que explota los sábados. El próximo 10 de junio se hace la apertura regional de un torneo de fútbol femenino organizado por la Unión de Clubes de Barrio donde compiten clubes de Varela, Quilmes, San Vicente y Almirante Brown. Nosotros llevamos seis categorías representando a Varela».
La importancia de la Unión de Clubes de Barrio. Maraude señaló: «La Unión es sinónimo de contagio. Nosotros dejamos de lado el deporte y gestionamos todo lo posible. La bandera deportiva y social que el vecino reconoce porque nos ve hacer relevamientos y estadísticas de los clubes. Salimos a los clubes y hacemos mantenimiento, les damos una mano a los directivos haciendo pintura, cortando el pasto, ayudando con los alambrados. Es una linda tarea que contagia a otros directivos».
«Hace semanas tuvimos un encuentro con el SEDRONAR, porque la problemática de las adicciones existe. Nosotros tenemos que brindar herramientas, por eso decidimos hacer una capacitación con el SEDRONAR. Las adicciones existen y los clubes de barrio tenemos que buscar soluciones contra un flagelo. A veces tenemos chicos todo el dia en el club porque no tienen contención de la familia. Eso también es un club de barrio, por lo menos en Florencio Varela. Nosotros sabemos que familia y que contención tiene porque tenemos que fortalecer y darle formación a esos pibes que luego serán jóvenes«.
Periodista / Abrí la Cancha

 

 

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