Fernando Parenti: «Yo le enseñé a tirar paredes a los Albañiles de Lanús»

1830

Fernando Parenti pasó por las Charlas de Vestuario de Abrí la Cancha. Surgió en el Lanús de los míticos Albañiles. Luego, fue segunda guitarra del Racing de José. Una vida ligada al fútbol. Un estudioso del juego. Una charla con afecto.

Por Carlos Aira 

 

SUEÑOS DE FUTBOL: «Arranqué en Arsenal de Llavallol cuando jugaba en Tercera de Ascenso. ¿Sabés la de cracks que salieron de ahí? Anotá: Bocha Maschio, el Polaco Cap y Natalio Sivo, entro otros. Ahí lo tuve al Gordo Díaz como técnico. Un formador de jugadores como pocos. Nos daba algo que ahora falta: conceptos».
«El Gordo Díaz, se fijaba en todos los detalles. En lo futbolístico, cuando recibíamos una pelota, teníamos que saber que hacer con ella. Que todas las pelotas son para continuar, y no para volver a empezar. Y después te tiraba otros conceptos: pelo corto para que no te lo toques ni te distraigas. Se fijaba en todos los detalles. En aquellos años los cigarrillos venían sin filtro y nos vestíamos con saco obligatorio. El Gordo metía la mano en el saco. Si encontraba tabaco suelto te decía: «Pibe, no vengas más«. El Gordo laburaba para vender jugadores. Era un negociante del fútbol, no era una monjita, pero se preocupaba de todo, y era un docente de los que ahora no hay«.

 

 

DOCENTES: En el fútbol argentino faltan docentes. Gente que tenga conceptos futbolísticos claros. Mirá en ésta carpeta que armé en el tiempo libre que tengo en la empresa (saca dos gruesas carpetas de prolijos apuntes futboleros, repletas de excelentes dibujos y recortes de prensa). Fijate Carlos, un arco tiene la superficie de 363 pelotas (me muestra el dibujo), pero los jugadores no patean al arco. ¿Sabés porque? Porque manejan correctamente el 80% de su perfil y sólo el 10% del otro. Nadie les enseñó. Nadie los puso frente a un espejo para que se vean cuando impactan la pelota».
«Sintetizando, en mi lenguaje ¿cuando un equipo de fútbol juega bien? si juega en 35 o 40 metros, como cuando comenzó el partido, juega bien. van juntos, y vienen juntos. Son como los 10 dedos de la mano juntos. Hay menos posibilidad de errar los pases. Y el rival no puede jugar porque tenemos ocupados los espacios nosotros. En cambio, si abrimos la mano, los espacios los tiene el rival. Uno de los conceptos básicos para jugar bien es crear superioridad numérica sobre el rival».

 

¡La redondita de Parenti! Figura en el Lanús que ascendió a primera en 1965.
LANUS: «En 1961 pasé a River Plate. Fui uno de los primeros jugadores que hizo pretemporada. La realizamos en Montevideo junto a Sarnari, Tedesco, Grispo y Fernández, los que teníamos más posibilidades de llegar a Primera. Me reprocho mi etapa en River. Fuí un tarado que no tomó responsabilidades. En 1964 me llevó Lanús. Allí encontré a Roberto Avalos, un amigo del alma con quién luego hice dupla técnica. La madre de él me dio valores espirituales que fueron fundamentales en mi vida. Reflexioné mucho. Me hice devoto de la Virgen del Luján. Y allí comenzó mi carrera en Serio».
«En Lanús debuté medio de casualidad. Jugaba en Reserva de zaguero central. Se descompuso el 8 titular una tarde en Temperley y me mandaron a mí a la cancha. Quedé en el primer equipo, y no se si hasta el día de hoy hay otro jugador en ese puesto en la historia granate que haya superado mi promedio de gol. Teníamos un muy buen equipo. Siempre recuerdo una frase de Francisco Freire, que era nuestro entrenador: «El fútbol es como el alambre tejido, son todas diagonales«, y es una verdad absoluta».

 

El equipo de Lanús campeón 1964. Junto al DT Francisco Freire: Roberto Tedesco, Francisco Bravo, Juan Guidi, Roberto Avalos, Roberto Paz y Rolando Irusta. Agachados: Osvaldo Iglesias, Ángel Silva, Bernardo Acosta, Fernando Parenti y Juan José De Mario.

 

LOS ALBAÑILES: «No sabía gambetear, lo admito, pero tenía panorama, pegada e inteligencia para tirar paredes o picar al vacío. No quiero parecer pedante, pero yo le enseñé a tirar paredes a Los Albañiles y tiene una explicación. Siempre viví en Bosques, y eramos pocos los pibes. Con mi hermano jugábamos en una cancha de bochas, y usábamos las paredes como si fueran compañeros. Eso se lo transmití a mis compañeros en Lanús y nacieron los famosos albañiles».
«Me da un poco de vergüenza esto que digo, porque en ese momento me faltó personalidad. Aparecer más en las fotos, en las declaraciones. Jugaba para el equipo, no para la tribuna. Si una pelota sabía que se iba larga, no la corría para conformar a la tribuna. Tal vez era demasiado manso. Pero fui parte de grupos sin envidias ni resquemores».

 

DANTE PANZERI: «Dante Panzeri me dio la medalla más grande que tengo. Frente a San Lorenzo, en el 65, hize un gol similar al de Maxi Rodriguez a México en el Mundial de Alemania. Ese dia Panzeri escribió: «Lanús ganó porque tiene un gran jugador. No por lo habil, sino por lo técnico, lo inteligente, lo bien que le pega a la pelota con la misma en movimiento. Por lo bien que corre al rival y se corre del rival«.

 

14 de febrero de 1966. Presentación de Parenti en el Racing Club. Victoria 2 a 0 ante el Spartak Praga en Independiente.
RACING: «Llego a Racing a comienzos de 1966. Estaba en Bosques, en un terreno cerca de la iglesia, comiendo un asado junto a amigos. Paró un auto y se bajó un hombre. Era Rufino Ojeda, quien había sido mi profe en River. Pentrelli se iba, y necesitaban alguien en esa posición. -¿Nando jugás en Racing? ¡Como no voy a ir a Racing!».
«Lástima que me lastimé pronto. Estuve casi todo el 66 parado. En 1967 comencé a jugar. Campeonato y Copa. No fuimos más de 18 jugadores. Fue vital para esa etapa el Profe Ojeda quién no es recordado. Nos daba entrenamientos diferenciados, pero nunca pesas. Éramos todos elásticos. Mucho trabajo en colchoneta y elongación. Por eso tuvimos una rotación nunca vista antes. Perfumo le cubría las espalda a los marcadores. Despliegue en Mori y Rulli. El Cerebro de Maschio. Teníamos los conceptos que Pizzuti nos daba: No hacíamos futbol reducido. Nosotros hacíamos fútbol en serio. No en quintitas. Nos conocíamos los límites individuales por eso pensábamos. Recordá ésto Carlos: Los que mas piensan son los que menos corren. Había que ganar. Pero era un equipo equilibrado como la gran siete…».

 

 

EL AVION DE MEDELLIN: «¡Vos no sabés el susto que nos pegamos en Colombia! viajábamos de Bogotá a Medellín por la Copa. De pronto el avión comenzó a caer. Creíamos que nos matabamos. Habíamos llevado como mascota a un pibe colombiano que le faltaban las dos piernas. Gerónimo se llamaba, aunque le decíamos Firestone, porque tenía dos pedazos de cubierta de goma en los muñones. Cuando el avión caía el pibe se puso a rezar. Lo vió Luisito Carrizo, que falleció hace poco, y tartamudo como era le dijo: «¿Nene, vos para que rezás? si te morís, ¡te morís por la mitad!».

 

Marzo de 1967. Victoria de Racing en cancha de Quilmes. Ahí están: Jaime Martinoli, Fernando Parenti, Juan Carlos Cárdenas, Juan José Rodríguez y Humberto Maschio.

 

EL DIA DESPUES: «Cuando tenía 27 años, Rodolfo Kralj me habló para hacer el curso de técnico. No lo hice en ese momento y si en 1989. Entrené a Lanús en 1986, a Quilmes interino en 1992 y a Defensa en 1994, siempre junto a Avalos. Me encantaría volver a trabajar. Volcar todos mis conocimientos. Todas mis reflexiones. Explicarle a un jugador que tienen que concentrarse noventa minutos. ¿Qué son noventa minutos en la semana? Agradezcámosle a Dios la plata que podemos manejar. Hay que enseñar a pensar en él fútbol. No en el coche, en el country o en las chicas. Seamos inteligentes y vamos a hacer más plata si hacemos bien la nuestra».

 

LAS FILIALES DE RACING: «Honestamente, me hicieron jugar nuevamente en Primera. Me devolvieron la confianza en mi mismo. La primera vez que viajé a Barcelona, invitado por la filial de allá, lloré todo los días. fue muy emocionante. No lo esperaba a esta altura de mi vida. Una vez, laburando en el campo con las obras de la empresa, me decía: quisiera volver a viajar en avión y lo logré. Racing me devolvió la vida. La Filial de Florencio Varela tiene mi nombre. Viajé a Escocia en el aniversario 30 de la final ante el Celtic. El reconocimiento de los jugadores actuales del plantel a quienes hemos recibido en casa de Coco Rulli. No tengo palabras para agradecerle tanto a la gente de Racing».

 

Periodista y escritor. Autor de Héroes de Tiento y Héroes en Tiempos Infames. Conductor de Abrí la Cancha, por Radio Gráfica FM 89.3

Comentarios

comentarios