El club de Liniers no encuentra rumbo en el campeonato; pero lo que es peor: tampoco en lo institucional. Un club modelo que atraviesa una crisis enorme.
Por Carlos Aira
Los silbidos le dieron paso a los insultos. Luego del empate 0 a 0 ante Rosario Central, los cientos de socios e hinchas presentes en el José Amalfitani reprobaron a la Comisión Directiva, responsabilizándola del duro momento deportivo e institucional.
Un club que perdió el rumbo en varios frentes. Ayer nomás, Vélez se codeó con el problema del promedio. Una vez que retomó el rumbo con un gran 2021, la contratación del uruguayo Alexander Medina marcaba un nuevo rumbo. Error. La semifinal de Copa Libertadores 2022 fue un espejismo: el equipo no hizo pie en ninguno de los campeonatos. Al problema deportivo habría que sumarle una grave crisis institucional.
«Hubo un momento que los dirigentes dejaron dejaron de poner al club como prioridad para ponerse ellos«, señaló el periodista Emiliano Curuchaga, quién agregó: «La pandemia fue cruel con Vélez. El equipo había zafado del descenso y con Mauricio Pellegrino se había clasificado a la Copa Libertadores. La sensación que le quedó a muchos socios es que la Directiva, ante el difícil problema de la falta de ingresos por entradas y eventos, decidió poner por delante sus problemas ya qué, para la masa societaria, ellos entendieron que habían solucionado el problema heredado de la gestión de Raúl Gámez».
Un poco de historia. En noviembre de 2014, el histórico Raúl Gámez asumió la conducción de Vélez Sársfield. Más centrado en los vaivenes del tembladeral de la sucesión de Julio Grondona que en la situación interna de su club, dejó en 2017 al club en una situación incómoda en lo deportivo. Asumió Sergio Rapisarda, 58 años, agente inmobiliario, candidato de Cruzada Renovadora, quién buscó cerrar filas en la siempre intensa política del club de Liniers. «¡Hay que sacar a Vélez adelante con la gente de todas las agrupaciones!», proclamó en su asunción.
Rapisarda fue reelecto por amplio margen en marzo de 2021. A pesar del voto de confianza, el El frente interno se fue agigantando como la figura del Licenciado Diego González, vicepresidente primero del club.
Martín Benazzi cubre la vida del club para Pasión Fortinera. En comunicación con Abrí la Cancha detalló con detalles: «Vélez atraviesa una crisis institucional. El presidente y el vice están peleados. Este es el segundo mandato de Rapisarda y el último por estatuto. La información que manejamos es que no estará presente en inguna lista, pero la pelea intestina de Cruzada Renovadora se siente en todos los ámbitos, incluso en el campo de juego porque el plantel no esta ajeno. No es lógico que Vélez no pueda juntar 10 dirigentes todos los lunes para sentarse con los referentes del plantel. Así de grandes son las diferencias. Vélez es un club que siempre limpió los trapos dentro de casa y no está pudiéndolo hacer«.
Hoy Vélez camina hacia una elección en el cual el oficialismo está partido entre seguidores de Rapisarda y quienes apoyan a Diego González, que se presentaría a las próximas elecciones con el sello de Cruzada Renovadora.
Benazzi analizó en Abrí la Cancha: «La angustia de los hinchas pasa por no sentirse representado por los dirigientes«
¿La oposición? El 10 de mayo pasado se llevó adelante un encuentro en el cual se oficializó Primero Vélez; la fusión de Círculo El Fortín (Raúl Gámez) y la Agrupación José Amalfitani. Junto a ellos, otro espacio político llamado Plan V, liderado por Augusto Costa. Quien lo sepa, fue Vicepresidente 2ª en el primer gobierno de Rapisarda y en la actualidad es el ministro de Producción de Provincia de Buenos Aires. Costa pica en punta para la candidatura presidencial de Vélez Sársfield.
Vélez tuvo una escuela de dirigencia que se fue perdiendo. Benazzi analizó: «Vélez no alimentó nueva dirigencia. Los hinchas no se sientes representados por Sergio Rapisarda. Con el espejo retrovisor podemos analizar que el punto de partida de este problema comienza a darse cuando Rapisarda deseó involucrarse en la rosca de la Liga Profesional bajo el ala de Marcelo Tinelli. Ahí comenzó el desapego de los socios con Rapisarda».
Luego de una década, Ricardo Gareca volvió a Vélez Sársfield sabiendo que es un año político en el club. «No está pensando en lo político, si bien es consciente de la situación», señaló Benazzi, quién agregó: «Si los resultados no acompañan, no sé cuando tiempo puede aguantar Ricardo Gareca. Los hinchas saben que el Tigre no es responsable de la situación. La tribuan puede preguntarse por qué juegan Bou y Pratto juntos, pero no es un tema central. Acá hay otro actor para tener en cuenta es Christian Bassedas, manager del club . Cuando se acerquen las elecciones, su respuesta tendrá peso en la masa societaria del club».
Velez marcha en los últimos puestos del campeonato 2023, con sólo 3 triunfos en 16 partidos. Hace 10 meses que no gana fuera del José Amalfitani. De terminar hoy el campeonato comenzaría con uno de los peores promedios la temporada 2024.
La vida sigue y el busto de Don José Amalfitani contempla la escena.
Periodista y escritor. Autor de Héroes de Tiento y Héroes en Tiempos Infames. Conductor de Abrí la Cancha, por Radio Gráfica. Premio Jauretche 2021 a la Investigación Periodística.